OMI aprobó una normativa sobre emisiones netas nulas para el transporte marítimo mundial

Los asistentes al seminario de la OMI donde se establecieron las normativas.

El proyecto de reglas establecerá una norma sobre combustibles marinos y una fijación de precios de las emisiones de GEI obligatorios.

La Organización Marítima Internacional (OMI) dio un paso histórico hacia el establecimiento de un marco jurídicamente vinculante para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) procedentes de los buques en todo el mundo, con el objetivo de alcanzar emisiones netas nulas para 2050.

El marco de emisiones netas nulas de la OMI es el primero del mundo que combina límites obligatorios de emisiones y fijación de los precios del carbono en todo un sector. Aprobadas por el por el Comité de Protección del Medio Marino, las medidas incluyen una nueva norma sobre combustibles marinos para buques y un mecanismo mundial de fijación de precios.

Estas medidas, que esperan ser adoptadas formalmente en octubre de 2025 antes de su entrada en vigor en 2027, serán obligatorias para los grandes buques navegación marítima que superan las 5 000 toneladas de arqueo bruto, los cuales emiten el 85 % del total de las emisiones de CO2 procedentes del transporte marítimo internacional.

El secretario general de la OMI, Arsenio Domínguez, señaló que "la aprobación del proyecto de enmiendas al Anexo VI del Convenio MARPOL por el que se establece el marco de emisiones netas nulas de la OMI representa otro paso en nuestra labor colectiva para combatir el cambio climático y modernizar el transporte marítimo, y pone de manifiesto una vez más que la OMI cumple sus compromisos".

El marco de emisiones netas nulas de la OMI se incluirá en un nuevo capítulo 5 del Anexo VI del Convenio internacional para prevenir la contaminación por los buques (MARPOL). El objetivo es alcanzar los lineamientos climáticos fijados en la Estrategia de 2023 de la OMI sobre la reducción de las emisiones de GEI procedentes de los buques, acelerar la introducción de combustibles, tecnologías y fuentes de energía de emisiones de GEI nulas o casi nulas, y apoyar una transición justa y equitativa.

De esta manera, los buques deberán cumplir una norma mundial sobre combustibles y deben reducir intensidad de los gases de efecto invernadero de los combustibles (GFI) anual, es decir, la cantidad de GEI emitidos por cada unidad de energía consumida. Esto se calcula utilizando el enfoque "del pozo a la estela".

Por otra parte, los buques que emitan por encima de los umbrales de GFI tendrán que adquirir unidades de recuperación para equilibrar sus emisiones deficitarias, mientras que los que utilicen tecnologías emisiones nulas o casi nulas de GEI podrán optar a recompensas económicas.

Habrá dos niveles de cumplimiento de los objetivos de intensidad de los GEI de los combustibles: un objetivo de base y un objetivo de cumplimiento directo en el que los buques podrían optar a ganar "unidades excedentarias".

Los buques que emitan por encima de los umbrales fijados pueden equilibrar su déficit de emisiones transfiriendo unidades excedentarias desde otros buques, utilizando las unidades excedentarias que ya han acumulado, y utilizando unidades de recuperación adquiridas mediante contribuciones al Fondo Net-Zero de la OMI.