Experto proyecta desafíos portuarios en Magallanes
La naciente industria del hidrógeno verde demandará nuevas y más grades instalaciones portuarias para la importación de grandes partes y maquinarias para parques eólicos y plantas productoras y la exportación de amoníaco, combustibles y otros productos.
En la actualidad hay tres proyectos a escala comercial que ingresarán este año sus estudios de impacto ambiental para producir hidrógeno verde y sus derivados en Magallanes, pero aún hay diez empresas más que están en etapas previas de análisis sobre inversiones en la zona.
La naciente industria demandará en los próximos años capacidades portuarias que hoy no existen en la región y ya se tramitan concesiones marítimas para proyectos portuarios en el estrecho de Magallanes.
El doctor en ingeniería de la construcción y académico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Matías Valenzuela, participó en un seminario en Punta Arenas sobre la industria donde analizó los requerimientos y desafíos portuarios para la zona.
Junto con explicar que hay distintos modelos de gestión portuaria según los roles de importación o exportación y el tipo de producto, planteó que los proyectos para futuros puertos deben considerar la disponibilidad de suelo, acceso al agua y las características de la industria en su entono.
Pero el hecho de construir un puerto desde cero en Magallanes resulta una ventaja, según el experto, porque los parámetros y estándares a implementar se van a asociar a alta calidad en los distintos elementos constructivos, como las tuberías de transportes, estructuras de almacenamiento y atracaderos, por ejemplo.
Enfatizó que la planificación constructiva debe poner atención en la mitigación de riesgos naturales y antropogénicos que amenacen las operaciones portuarias, asociadas a factores climáticos, derrames, explosiones o corrosión, entre muchos factores.
Igualmente, el doctor Valenzuela dijo que será importante que la construcción sea lo más verde posible, con medidas de bajas emisiones en el proceso constructivo y logístico.
Por ahora, la propuesta de construcción portuaria vinculada a la nueva industria es la que surgió de un acuerdo entre la Empresa Nacional del Petróleo y las privadas HIF Chile, HNH Energy y Total Eren para habilitar el terminal Laredo para los requerimientos de las empresas en la fase de importación de los equipos y maquinarias.
Se trata de un terminal ubicado en Cabo Negro, al norte de Punta Arenas, usado para la carga de graneles líquidos. Con la participación de la estatal y los privados se transformaría en la primera instalación para el ingreso de equipamiento especializado, con una inversión cercana a US$ 50 millones.
En una primera etapa el acuerdo se centrará en los estudios para definir cómo reconfigurar Laredo, que fue construido por Enap en los años 70, para entregar una solución portuaria óptima para la carga y descarga de equipamiento industrial en la construcción de proyectos asociados al hidrógeno verde y derivados en Magallanes.