Paro portuario en la Costa Este de EE.UU. afectaría a más de 500 contenedores con fruta chilena
Los efectos de la paralización de las actividades portuarias en 36 puertos de Estados Unidos tienen en estado de alerta a la economía mundial. En Chile, los gremios exportadores se mantienen expectantes ante las posibles repercusiones de este movimiento.
Pérdidas económicas que podrían elevarse a los 4.500 millones de dólares por día son las estimaciones de los expertos ante la paralización de actividades de los trabajadores portuarios de la Costa Este y el Golfo de Estados Unidos que se inició este martes. Son 36 puertos que se sumaron al llamado de la Asociación Internacional de Estibadores (ILA) que busca mejoras en los salarios y la anulación de una cláusula de automatización en un contrato.
Chile no está ajeno a este problema toda vez que gran parte de las exportaciones llegan al mercado norteamericano lo que podría provocar serios inconvenientes en la cadena logística. “Para nuestro país la situación es preocupante porque Estados Unidos representa cerca del 17% de nuestras exportaciones, solo superado por China, nuestro principal socio ", señaló el académico de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Los Andes, Nicolás Román.
Incluso fue más allá y aseguró que "esta paralización de los puertos americanos podría impactar directamente la producción nacional, el empleo y provocaría un alza del tipo de cambio, alza también de precios de productos importados y de la inflación”. De ahí la preocupación de los diferentes sectores económicos a nivel país con el futuro de esta movilización, la más grande de los últimos 50 años en Estados Unidos.
"Nuestros registros nos indican que estarían siendo afectados más de 580 contendores de frutas frescas chilenas, algunos de los cuales habrían sido dejados en Panamá ante imposibilidad de continuar a destino o bien que no podrán desembarcarse al llegar a la costa este, quedando el buque a la gira con los costos asociados y la pérdida de los programas de entrega a los distribuidores en EEUU", señaló el gerente general de Frutas de Chile, Miguel Canala-Echeverría.
Según detalló, estos contenedores corresponderían a aproximadamente 11.743 toneladas de frutas de frescas chilenas con 11.362 toneladas de cítricos, 177 toneladas de kiwis y 204 toneladas de paltas, con un valor FOB estimado de 37 millones de dólares. “Como Frutas de Chile nos encontramos monitoreando muy de cerca la situación, ya que si el conflicto se extiende en el tiempo podría afectar a frutas que se encuentran en tránsito", indicó el representante del sector frutícola.
A juicio de Miguel Canala-Echeverría, el mayor problema es que “las navieras tienen un itinerario que cumplir y la norma les permite derivar la carga o dejar la carga en el puerto más cercano al programado si la situación lo amerita. Así las cosas, por ejemplo, si un barco no puede desembarcar la fruta en los puertos de la costa este y su siguiente escala es un puerto en Europa, lo más probable es que la nave espere un tiempo prudente y continúe a su próximo destino con el consiguiente deterioro de la carga y costo para el productor y exportador chileno".
Por su parte, la ex gerente general de la Asociación Logística de Chile (ALOG), Cynthia Perisic, sostuvo que esto provocará “un retraso importante, tanto para las importaciones como para las exportaciones, y un sobrecosto que va a ir asociado y que lo vamos a pagar todos, tanto aquí como allá. Lamentablemente los costos siempre se traspasan al cliente final, por lo tanto, al haber un extra costo vamos a terminar pagando todos, como ha sido siempre. Esto es siempre igual”.
Para René Fernández, economista y académico de la Universidad de Santiago (USACH), “un punto relevante a considerar es que el paro portuario ha iniciado con demandas que dan cuenta de una postura bastante extrema, pues la solicitud de aumento salarial por sobre el 50% sumado a la no utilización de ciertas máquinas, es un “desde” que deberemos apreciar si se trata de un punto de inicio en la negociación o de una postura intransable. La distancia de la postura inicial con una postura atendible nos permite teorizar sobre una potencial extensión prolongada de la situación de paralización portuaria”.
A juicio del economista, esta paralización implica riesgos para quienes trabajan indirecta o directamente en los procesos de exportación hacia Estados Unidos. “Chile exporta diversos productos a Estados Unidos, muchos de los cuales utilizan la vía marítima, pero las principales que siguen esa ruta son el cobre refinado, los filetes de pescado y las uvas”, explicó el académico de la USACH.
Por último, indicó que “existen productos que, de extenderse el paro portuario, no podrán almacenarse manteniendo el buen estado de los mismos y ello sería un costo directo de la situación que alguien debiera enfrentar. Por otro lado, también habrá consecuencias en las exportaciones de Estados Unidos hacia Chile, donde destaca petróleo refinado, gas petróleo y camiones de entrega”.
La dura postura de la ILA en el conflicto
“Los estibadores merecen ser compensados por el importante trabajo que realizan para mantener el comercio estadounidense en movimiento y creciendo. Es vergonzoso que la mayoría de estas compañías navieras se dediquen a una operación de hacer y recibir, quieren obtener sus ganancias de miles de millones de dólares en los puertos de los Estados Unidos a costa de los estibadores estadounidenses”, señaló el sindicato de la Asociación Internacional de Estibadores (ILA).
El líder de esta movilización es Harold Daggett, presidente de la ILA desde el año 2013. Desde esa fecha asumió un papel protagónico en la defensa de los derechos de los trabajadores portuarios norteamericanos. En su carrera sindical lideró gran cantidad de negociaciones abogando por aumentos de salarios, mejores condiciones de trabajo y estabilidad laboral frente a procesos como la automatización en los puertos de Estados Unidos, uno de los puntos importantes en esta negociación.
El líder sindical ha estado en la primera línea en las primeras horas de la paralización de los puertos de la Costa Este de Estados Unidos. “Quiero decirles a todos que lo que están haciendo es correcto. Esto pasará a la historia, lo que estamos haciendo aquí”, dijo en una de sus alocuciones a los trabajadores movilizados en lo que se ha denominado como el paro más grande de los últimos 50 años en Norteamérica.
Por ahora, medios internacionales aseguran que el presidente Joe Biden solicitó a sus equipos que transmitan un mensaje donde se llame al diálogo entre ambas partes para lograr un acuerdo justo y rápido, de tal manera de evitar un problema económico mayor si es que la paralización se mantiene en el tiempo. La Casa Blanca indicó en un comunicado que la administración se encuentra continúan trabajando las 24 horas para lograr una solución que deje a todos satisfechos.