Camport visualiza un potencial riesgo estratégico con el megapuerto de Chancay
El presidente de la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), Daniel Fernández, repasó los factores logísticos y estratégicos del puerto peruano. Además analizó la seguridad portuaria y proyecto de ley de cabotaje.
Una aguda crítica a la capacidad que actualmente tienen los puertos para adaptarse a la atención de naves de gran escala realizó el presidente de la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), Daniel Fernández, en su presentación en el marco del lanzamiento de un nuevo suplemento del diario El Mercurio de Valparaíso en dependencias del DuocUC.
“¿Es el puerto de Chancay una amenaza inmediata para los puertos de Chile? Creo que no. Pero si nosotros no tenemos la capacidad de adaptar nuestros puertos en condiciones que exigen inversiones muy fuertes, vamos a tener un problema en un cierto plazo. El único proyecto concreto que uno ve es del puerto de Valparaíso que va a tener un sitio de atraque que le va a permitir competir, de alguna manera, en esta escala mundial”, indicó el directivo.
Daniel Fernández agregó que el puerto de San Antonio, con todo lo bueno que puede ser el proyecto, tiene a su pesar un horizonte con un plazo bastante largo. “Entonces, me pregunto si estamos teniendo la mirada geopolítica que amerita tomárselo en serio. No podemos llegar a ser un punto más en el itinerario de trasbordos de grandes naves que llegan a Chancay porque tenemos un riesgo estratégico y es que los puertos del Pacífico Sur sean de alguna manera puntos satélite de éste”, dijo.
El presidente de Camport explicó que existen ciertos elementos de base para que la industria marítima-portuaria pueda cumplir con su rol estratégico aprovechando que Chile posee una gran integración comercial con acuerdos de libre comercio con gran parte del mundo y que gran cantidad de su carga hacia el exterior se mueva por transporte marítimo.
Aseguró que imponderables que afecten la logística y el desarrollo de la industria siempre existirán, como el problema hídrico del Canal de Panamá, la guerra en el Medio Oriente o la invasión de Rusia a Ucrania, y que ante eso es imposible anticipar acciones. “Pero hay otras en que sí podemos actuar, como por ejemplo, el desarrollo del puerto de Chancay”, reflexionó.
Seguridad portuaria y ley de cabotaje
Daniel Fernández también se refirió a la seguridad portuaria, otro eslabón importante en la cadena logística, y la calificó como una amenaza estratégica que es necesario tomar en cuenta. “Hace cinco años no nos imaginábamos el riesgo que significa el crimen organizado y el narcotráfico para Chile. La cadena logística sufre ataques permanentes y solamente entre los años 2021 y 2023 se registraron 49 asaltos a instalaciones portuarias o recintos de almacenamiento portuario con daños directos por nueve millones de dólares”, acotó el presidente de la Cámara Marítima y Portuaria.
Uno de los problemas más graves en este sentido es la amenaza del narcotráfico. El ejecutivo fue tajante al señalar que es imposible en estos momentos escanear el cien por ciento de la carga y “estamos siendo un pasadizo de la droga porque tampoco podemos usar un escáner básico con un funcionario por más buena voluntad que tenga para controlar este flagelo. Necesitamos escáner e inteligencia artificial que nos permitan revisar el total de la carga pero sin afectar la operación y la eficiencia logística”.
Daniel Fernández, como voz oficial de la Camport, también se refirió a otro tema que es factor de competitividad en esta industria: el cabotaje. Explicó que desde un punto de vista conceptual, como Cámara Marítima y Portuaria, están a favor de una apertura total del cabotaje en nuestro país pero que también entienden que existen particularidades y por lo tanto sienten que el acuerdo actual es bastante razonable.
“Si bien uno lo quisiera la apertura al cien por ciento, mientras el proyecto de ley reconozca a los contenedores de comercio exterior como no cabotaje a nosotros nos basta, porque un contenedor que es de comercio exterior, no porque se deje temporalmente en un puerto, pasa a ser cabotaje sino que sigue siendo de comercio exterior”, concluyó.