Puerto San Antonio presentó en FILCE proyecto Puerto Exterior y los desafíos asociados a su desarrollo
Gerente general (i) de la estatal, Fernando Gajardo, expuso la necesidad de infraestructura logística y destacó el proyecto como una solución a los desafíos del comercio exterior en la macrozona central de Chile.
Publicado
El gerente general (i) de la Empresa Portuaria San Antonio (EPSA), Fernando Gajardo Vásquez, presentó en la reciente Feria Internacional de Logística, Comercio Exterior & E-commerce (FILCE) 2023 la charla “Puerto Exterior: Un proyecto fundamental para el comercio exterior chileno”, instancia donde destacó la importancia de abordar la creciente demanda en el comercio exterior y la necesidad de una infraestructura logística adecuada en la macrozona central de Chile, la cual “si la tomamos desde la Cuarta Región hasta la Región del Maule, es aproximadamente el 60% del PIB nacional y de consumo, obviamente, y un 63% de la población de Chile”, comentó Gajardo, a la vez que subrayó la importancia de planificar en consecuencia y brindó datos históricos sobre el crecimiento del comercio y el tamaño de las naves que han llegado al país.
Destacando la congestión en los puertos y los problemas de tráfico, el gerente enfatizó la necesidad de un enfoque coordinado en la planificación logística, señalando que la falta de planificación puede llevar a pérdidas significativas en servicios portuarios y fletes navieros. Además, destacó que el proyecto del Puerto Exterior es un proyecto de Estado, que ha sido respaldado por múltiples gobiernos a lo largo del tiempo. “El principal desafío es que a fines de 2025 o 2026, las obras estén partiendo ya con todas las aprobaciones correspondientes, por lo tanto, este es un proyecto de Estado, eso es lo que quiero decir, no es un proyecto de Puerto de San Antonio, no es un proyecto de la particularidad que tiene la bahía de San Antonio, es un proyecto de Estado, y eso es lo importante que hay que destacar”, puntualizó Gajardo.
Proyecto
El proyecto contempla la construcción de 2 terminales nuevos para recibir buques portacontenedores de clase E (de 400 metros de eslora), así como la expansión de la capacidad portuaria de 2 millones y medio a 6 millones de TEU (anuales), además, abordará la necesidad de transferencia eficiente de carga y se enfocará en mantener tiempos de permanencia de carga eficientes. También, incluye la construcción de un nuevo rompeolas de 4 kilómetros, diseñado para proteger contra tsunamis y terremotos. Gajardo también destacó la responsabilidad social de la empresa portuaria en relación con la comunidad y la gobernanza.
Las obras, que estiman una inversión de 4 millones de dólares, implican desafíos significativos, como el movimiento de grandes cantidades de material pétreo, la habilitación de canteras y la creación de accesos ferroviarios. Además, se planea la construcción de un terminal marítimo en fases, lo que se sincronizará con la demanda del país.
Desarrollo sostenible
El proyecto del Puerto Exterior no solo se enfoca en la expansión de sus instalaciones y la mejora de la eficiencia logística, sino también en su impacto en la comunidad y el medio ambiente. Se están llevando a cabo esfuerzos para minimizar el impacto en la zona pesquera, y se está colaborando con el sector pesquero en un plan de mitigaciones para garantizar que la pesca no se vea perjudicada. Además, se está trabajando en la gobernanza del sector sur de Puerto San Antonio, involucrando a la comunidad, asociaciones ambientales y universidades para asegurar un desarrollo sostenible.
Con la construcción del proyecto del Puerto Exterior, se espera que haya alrededor de dos mil personas adicionales en la zona de San Antonio durante los siete u ocho años de construcción. Esto plantea desafíos en términos de educación, alojamiento y servicios de salud. Por ende, se están llevando a cabo programas de capacitación para proveedores y se está trabajando en una mejor integración de los servicios de salud.
Finalmente, Gajardo destacó los desafíos que enfrenta el puerto y la industria en general, incluyendo la necesidad de trabajar en un plan nacional de logística colaborativa, la implementación del agendamiento de cargas, el uso de sistemas de ventanilla única y el cumplimiento de las normas de infraestructura, entre otros.
