Gerenta de Colsa expuso sobre equidad de género en el ámbito marítimo portuario
En la reciente versión de la feria Trans-Port, la ejecutiva que encabeza la Comunidad Logística de San Antonio (COLSA) planteó que si bien hay una tendencia creciente de trabajadoras a nivel operativo en los puertos, aún falta mucho por hacer.
María Pilar Larraín expuso sobre la equidad de género en el ámbito marítimo portuario durante su presentación en la feria Trans-Port 2022, evento que se realizó entre los días 27 al 29 de septiembre en Valparaíso.
Para su presentación, la ejecutiva acudió a los datos del estudio “Brechas de género en la industria marítimo-portuaria de Chile” realizado por las universidades de Los Andes y de Valparaíso a partir de información de puertos, comunidades logísticas y otros organismos aportadas mediante una encuesta sobre las brechas de género.
Los resultados de este estudio confirman la disimilitud existente entre hombres y mujeres en cuanto a salario si se comparan personas con idénticas características sociodemográficas (edad, responsabilidad en el hogar, estado civil y educación) y laborales (experiencia, tipo de contrato, cargo, jefatura, organización). Sin ir más lejos, la diferencia es de un 6,4% en desmedro de las mujeres y en términos generales sube a un 11%. El estudio muestra además que la brecha en remuneraciones en empresas portuarias estatales es nula.
La situación en San Antonio
La expositora contó que en la distribución de género en la cadena logística portuaria de San Antonio, según datos levantados el 2019 en terminales, almacenes extraportuarios y depósitos de contenedores vacíos, la participación femenina alcanza el 16%. Respecto al directorio de Puerto San Antonio, éste actualmente tiene una participación femenina del 50%.
“Trabajadoras a nivel operativo en puertos es una tendencia que está creciendo, pero aún falta mucho por hacer, sobre todo en niveles ejecutivos y técnicos porque la mujer ya ha demostrado que funciona bien en la operación debido a sus cualidades como la responsabilidad, seguridad en términos de conducción, trabajo en equipo, enfrentar crisis y mejorar clima laboral, entre otros”, indicó María Pilar Larraín.
Añadió que las áreas de trabajo y cargos más recurrentes de mujeres en las cadenas logísticas están relacionadas con prevención de riesgos y salud ocupacional; recursos humanos, administración y finanzas; medio ambiente y relación con la comunidad. Y en menor medida, ejecutivas y en cargos técnicos; logísticos y de operación; áreas en las que la comunicación y coordinación son fundamentales y las mujeres poseen características favorables.
“Sensibilizar a los altos ejecutivos de la industria en ponerse metas de incrementar la participación de la mujer es una tarea que debemos realizar en conjunto con la academia y las políticas públicas educacionales que fomenten que las jóvenes se interesen por carreras técnicas y profesionales las cuales, hasta ahora, son altamente masculinizadas”, señaló.
La Organización Marítima Internacional ha afirmado que hay amplia evidencia de que invertir en mujeres es la forma más efectiva de levantar comunidades, compañías e incluso países: los países con más igualdad de género tienen un crecimiento económico mayor; los acuerdos de paz que incluyen a las mujeres son más duraderos; e incluso los parlamentos con mayoría femenina promulgan más legislación sobre asuntos sociales clave como la salud, educación, antidiscriminación y pensiones alimenticias.
