Transportistas disponen planes de contingencia ante huelga en puerto de Liverpool

El puerto de Liverpool, el cuarto en volumen de carga del Reino Unido, se sumó a la huelga que demanda mejoras sustantivas en sus salarios iniciada días antes por sus colegas en Felixstowe. Así lo consigna un artículo publicado en la página del Instituto de Exportaciones y Comercio Exterior británico, entre varios otros medios de prensa locales. Los quinientos trabajadores del terminal portuario del noreste del país, en su mayoría estibadores de carga proveniente de contenedores, acordaron rechazar la oferta de un incremento del 7% en su sueldo mensual. Un portavoz del sindicato liverpolita declaró la semana pasada a Loadstar que la oferta era "un recorte salarial en términos reales".

Recordemos que el terminal de Liverpool es un núcleo fundamental para las importaciones y exportaciones transatlánticas inglesas. Para complicar aún más el panorama, los ingenieros de mantenimiento del puerto podrían sumarse a la huelga este 24 de agosto. El puerto de Liverpool recibe un volumen de más de sesenta barcos y 75.000 TEUs al mes. Y si se suma el volumen de carga del puerto de Felixstowe, se agregaría un nuevo dolor de cabeza a la cadena de suministro global, esta vez generada por el alza sostenida del costo de la vida debido a la inflación que vapulea a los trabajadores portuarios.

Efectos en el transporte marítimo

Ante este curso de los acontecimientos, la operadora francesa CMA CGM está planeando utilizar lugares de descarga alternativos en el Reino Unido ante la inminente paralización. Otra implicancia, esta vez por la interrupción en Felixstowe, fue que el operador chino Cosco y la firma danesa Maersk ya están desviando sus servicios, lo cual complica a los transportistas que deben trasladar las mercancías por tierra.

Muchas firmas de transportistas marítimos están evaluando cursos de acción alternativos hacia otros puertos del Reino Unido que se encuentren plenamente operativos, en este caso los terminales de Teesport en el norte de Yorkshire y Tyne en Newcastle.

Las empresas de transporte han especulado con la posibilidad de que los operadores marítimos cancelen su arribo a los dos puertos; o al menos intenten desviar los contenedores hacia otros terminales cercanos en el continente. Por si fuera poco, Maersk ya informó a sus clientes que tiene la intención de intentar redirigir los buques a los puertos antes de la huelga. O, por último, retener el tráfico hasta que la mano de obra vuelva a estar disponible.