Raquel Meza: "Con la nueva ley de cabotaje el trabajador se va a quedar sin su fuente laboral”

El miércoles pasado la presidenta de la Fundación Mascarona, Raquel Meza, expuso ante la Comisión de Transportes del Senado su postura a la modificación de la Ley de Fomento a la Marina Mercante y Ley de Navegación propuesta por el Ejecutivo. Si bien es partidaria de una actualización a la legislatura cree que ésta tiene un gran problema: se ha hecho de forma unilateral.

“Soy de las personas que piensa que la modernización es algo que se debe realizar, sin embargo creo en las políticas de segunda generación, aquellas que indican que estos trabajos deben ser de forma integral, con todos los actores y las partes interesadas en esta área para que se pueda mejorar y modernizar”, explicó en entrevista con Agenda Marítima.

A su juicio, no se puede pretender que una ley que data del año 1979 no sea modernizada, principalmente por el cambio generacional, por los nuevos tiempos que se viven y por la actual estructura portuaria. Según la presidenta de la organización, no se puede permitir que “una ley como esta se haga de forma unilateral pensando solamente en la competencia del mercado sin pensar en el factor humano”.

“Si no somos capaces de comprender que la gente de mar es esencial no estamos hablando un mismo lenguaje. A lo mejor me van a decir que viene la automatización y si, puede ser, pero mientras eso no ocurre no podemos dejar a más de quince mil personas sin trabajo porque algo se hizo de forma unilateral”, expuso.

Raquel Meza recordó que la discusión respecto a la Ley de Fomento a la Marina Mercante y Ley de Navegación se extiende desde el segundo gobierno de Sebastián Piñera. “Llevamos prácticamente dos períodos discutiendo esto, no ha sido algo simple pero pienso que no ha sido así por la génesis de todo, porque no fue una política de segunda generación”, aseguró.

Para la presidenta de la Fundación Mascarona, “esta apertura de cabotaje que se propone es un fomento a la competencia, pero a una competencia desigual. Existe una diferencia muy grande en el valor de un buque con pabellón nacional versus uno con pabellón de conveniencia. El chileno cuesta un 50% más que uno con tripulación extranjera”.

Sobre este punto, explicó que “el empresariado no es el que va a perder con esto porque un empresario hace negocios y si éste no funciona va a buscar otro que sí funcione porque es lo que debe hacer. El trabajador no, el trabajador se va a quedar sin su fuente laboral, va a quedar en la calle. Eso me preocupa porque son quince mil trabajadores en la marina mercante, tanto en alto bordo como en aguas interiores”.

Raquel Meza entregó un ejemplo. “Perú cuando abrió su cabotaje eliminó todo y se moró quince años en recuperar un buque. Luego el cabotaje se volvió a abrir en 2019 pero lo vuelve a hacer en una política de resiliencia portuaria absolutamente diferente a la nuestra. Ellos tienen una nave portacontenedores y por supuesto que requieren para un puerto como Chancay tener un mayor flujo, pero las restricciones que ellos tienen para la bandera son mucho mejores que lo que se pretende hacer en Chile”, explicó.

Para finalizar fue enfática y aseguró que con esta modificación a la ley solamente pierden los trabajadores. “El empresariado va a saber reinventarse, puede ser cambiando banderas. Así que yo creo que acá no hay ganadores, acá solamente hay trabajadores que pierden y un país que puede perder toda una historia de transporte marítimo”.